mi6cientos.blog: Destino: FRANCIA (El viaje de ida)

Este fin de semana ha sido el primer gran viaje del Rocinante GT, el primer gran viaje despues de su restauración y el primer gran viaje que hacia con el... Tanto la ida como el durante y también la vuelta el coche se ha portado como un campeón aunque era de esperar porque iba todo nuevo, pero algo podía fallar, de hecho falló el bulbo de presión de aceite pero no fue tan importante como para tener que volver en grúa, pero como ya decía este viaje era especial porque era el primer viaje largo estando el coche en rodaje y el coche se ha portado... Por suerte nos habíamos hecho con unos tapones para los idos que nos poníamos cada vez que parábamos, porque si llegamos a ir "a oreja libre" teníamos que haber encargado una pareja de sonotones a la vuelta... No hace falta comentar que toda la gente que veía el coche (y mas con la bici montada en la baca) nos saludaba y pitaba haciendo fotos siendo los coches con mas bicicletas (que sin duda compartíamos destino) los que mas nos saludaban...

Paso a describir (en varias entradas) este fin de semana tan especial:

Como ya decía en la entrada anterior, el viernes (18 de Junio) nos levantamos para poder salir a las 6:00 a.m. Montamos la bicicleta en la baca y partimos dirección Sabiñanigo (Huesca) no sin antes revisar luces y la presión de los neumáticos, no queríamos lamentar averías ya que nos esperaban 459 km y mas de 5 horas de viaje...

Pasado Torremocha del Campo decidimos parar en un área de descanso para comprobar si todo iba correcto, ya que para hacer un buen rodaje la velocidad era constante entre 80 y 100 km/h. y la temperatura no subía de los 90º C.

Tras la breve parada seguimos con nuestro viaje y una vez pasado Calatayud (foto del castillo) paramos a llenar el deposito y de paso tomar un tentempié de media mañana...

Con los depósitos llenos volvimos a la carretera hasta que en el alto de La Muela vimos interrumpido nuestro viaje por un transporte especial que no nos abandono hasta llegar a Zaragoza, pero gracias a que nuestra media de velocidad era de 90 km/h no nos interfirió mucho en nuestro tiempo.

Cuando dejamos atrás el transporte especial seguimos nuestro camino afrontando la parte final del viaje, estábamos en los pies de los pirineos y cada vez eran mas los coches y furgonetas cargados con bicis que nos adelantaban, nos acercábamos a nuestro destino aunque las nubes no pronosticaban una buena estancia...

Cuando llegamos a Sabiñanigo nada mas entrar por el pueblo el coche causaba expectación, no se si por el coche, por el ruido o por el hecho de llevar una bicicleta en la baca... Pero nada mas llegar a la puerta del Hostal el revuelo fue notable, un grupo de andaluces se acercaron para preguntar por el coche y de paso hacerse una foto con el...

Una vez resuelto el tema del garaje desmontamos la baca del coche: ahora si era mi coche...

Después de desembarcar y comer fuimos a recoger el dorsal de mi padre, pero en un despiste tuvimos que volver a la habitación a por un documento, así que como la distancia era mucha y viendo que uno de las empresas colaboradoras era un concesionario SEAT decidimos ir con el coche e intentar exponerlos junto a los SEAT modernos, ni que decir tiene que tuve que enseñar a algunos curiosos, entre ellos un chapista y pintor del propio taller que dio su visto bueno.