Mi Opel Corsa, ¡todo un clasico!

Hoy día 21 de Junio, mi Opel Corsa 1.2 Luxus (aunque todavía es de mi madre) da un paso hacia su madurez en el mundo de los clásicos. Hoy se cumplen 25 años desde que salio de la cadena de montaje en Zaragoza, en resumen, mi Corsita ya es todo un clásico.

Me he permitido escribir esta entrada en el blog del Peladilla, porque es algo que llevaba esperando desde hacia muchos años, porque para mi el Corsita no es un simple coche, sino que es como un miembro mas de la familia y de tanto hablar de él, ya se merecía un hueco muy especial en el blog y que mejor que el día de su 25 cumpleaños para dar a conocer su historia a todos mis lectores.

Allá por el '88 y por necesidades laborales mi madre decide sacarse el carnet de conducir, se examina en un Lancia Delta, en el que yo iba sentado en el asiento trasero mientras daba clases. Al poco tiempo de sacarse el carnet, mis padres deciden comprar un coche para mi madre y aprovechando que mi padre trabaja en la Gerar (concesionario Opel) compran un Opel Corsa, con 5 años que había pertenecido al "Club Juvenil de Arguelles".

Desde entonces, el Corsita, llevaba y traía a mi madre del trabajo, y a mi a la guardería... todavía recuerdo el despertar por la mañana (aun de noche) y meterme en el coche de camino a la guardería tapado con una manta... o el parar en un semáforo y saludar al conductor de atrás, cuando los niños iban sueltos en el asiento trasero.

Paso el tiempo y el Corsita seguía al pie del cañón, nos llevo a Barcelona, teniendo yo a penas 10 u 11 años, tenia sus achaques como todos los coches, pero mi padre lo reparaba primero en su taller y después en casa, haciendo sus truquillos el Corsa siempre salia al paso, como la vez que se le quemo a mi madre el encendido y lo arrancaba con un pulsador. Una vez volvia del colegio y vi que habia habido un golpe en mi calle, el Corsa, que estaba aparcado frente a casa, salio mal parado porque el coche del vecino, aparcado también y que quedo siniestro total, le dio haciendo un efecto carambola. Y asi un sin fin de cosas, que por falta de interés (de entonces) no recuerdo...

En el '99 llego el día de despedir al GSA de mi padre, que fue rapidamente sustituido por el Saxo de mi madre, entonces fue cuando el Corsita se quedo para el uso esporádico de mi padre, hasta que mi hermano se sacó el carnet y le hizo kilómetros para aburrir, llegando a dar fin al motor original... tal era el desgaste que tenia que por el escape salían llamaradas de fuego...

Cuando mi hermano se compró un coche (otro Corsa), el Corsita volvió a manos de mi padre, que se pensó el deshacerse de él, pero por suerte conseguí convencerlo para no tirarlo y repararlo, para poder usarlo yo... Y así fue, mientras yo me sacaba el carnet, mi padre y mi hermano dedicaban las tardes a cambiar el motor en casa... y como no yo haciendo fotos (que por desgracia perdí). Cuando llegó la hora de dar clases practicas, nos íbamos al poligono a dar vueltas y ha hacerme con los mandos del coche, nunca olvidare la vez que pase al lado de la guardia civil con mas miedo que vergüenza... Ya con el carnet en mi posesión volví a convencer a mi padre para pintar el coche, le había pintado unos óxidos con pintura aislante de pared que parecían unas costras, quedando este como nuevo, puedo decir que fui un afortunado, porque desde el primer momento que tuve el carnet en la mano, ya tenia un coche en la puerta de casa, y no un coche nuevo, sino un coche que era como un hermano para mi. He ido con el de vacaciones a Asturias, subido a Covadonga y los Lagos de Covadonga, he corrido un Rally de Regularidad con él (y los que me quedan), y un sinfín de aventuras mas...

En todo este tiempo que el Corsa, ha pasado a ser de mi propiedad, he temido en varias ocasiones por su integridad, como la vez que me di un golpe en un atasco, por culpa de un chuleta con un mercedes, o la cantidad de veces que mi padre me ha castigado sin él o ha dicho que es un pozo sin fondo y que lo iba a vender, o cuando se compro su coche, que se suponía que lo iba a dar en plan prever o me lo vendía a mi por lo que le diesen... o mas recientemente, la ultima vez que me ha castigado, que se comió el solo la reparación del silencioso del escape (yo le he pagado las piezas o le he abonado la mitad desde que lo uso) que estuvo durante una semana, y aun sigue, diciéndome que lo vendemos y me compre un coche nuevo, hasta que le convencí de que me lo quedase yo a modo de herencia... por lo que mi propósito se había cumplido, conseguir que el Corsa llegase a los 25 años siendo de mi propiedad, aunque todavía pertenezca a mi madre... pero por poco tiempo.

Cierto es que es un coche antiguo, y que va ha tener muchos problemas (algún día lo restauraré y se le quitaran), pero yo creo que todos tenemos cariño a aquel primer coche, en este caso para mi en propiedad es el Peladilla, pero el Corsa, es mi coche desde pequeño... y por eso le dedico este homenaje que mis lectores espero perdonen, por no tratarse del Peladilla, pero me entenderán si piensan en el cariño que tienen ellos a sus 600...

Un saludo

Chema

PD: estoy esperando tener un hueco para hacer unas cuantas fotos de los dos coches juntos.