Restauración en pareja

sábado, 24 de febrero de 2007

Al volver de Retormovil, Carol me ha dicho que montase las piezas que he comprado, en especial el volante, pero como tampoco tenía muchas ganas de hacerlo le he dicho que solo iba a probar el claxon, así que en cuanto mis padres han sacado el Saxo del garaje le he metido y nos hemos puesto a ello.

Lo primero que he hecho ha sido probar los dos claxon que había comprado, y buscar alguna llave para quitar el volante, pese a que mi padre me ha dicho que ya lo haríamos, pero no ha habido suerte, no tenia ninguna llave que fuese de la medida para quitarlo. He probado los dos claxon, conectando la masa con un cable al volante con la ayuda inestimable de Carolina que me daba las llaves y pulsaba el claxon con algo de miedo porque en la primera prueba ha saltado un chispazo sin importancia.

Después de esto le he “obligado” a que quitase el plafón de la luz de la Matrícula mientras yo sujetaba el capó. Mientras yo colocaba el nuevo ella se ha puesto a limpiar y reparar el viejo, dejándolo para atornillar el nuevo, hay que reconocer que estaba un poquito verde, pero no se le da mal, tengo una buena ayudante.


Mientras ella limpiaba el capo por dentro sin que nadie se lo dijese yo he colocado uno de los limpias enseñándole como se ponía para que hiciese lo mismo con el otro. Como es una maniática de la limpieza me ha pedido un limpiador para quitarle la suciedad porque con agua no salía.


En un descuido se ha metido dentro del coche armada con el limpiador y un trapo y se ha puesto a limpiarlo al completo, como no podía pararla y eso que se lo he dicho en varias ocasiones, porque es mi labor limpiar el coche he quitado la palaca donde van los datos del coche para restaurarla y remacharla a la chapa porque se me ha perdido un tornillo, pero para esto he tenido que hacer unos agujeros mas grandes porque los remaches no entraban, he aquí el resultado:


Una vez terminada mi labor, Carol seguía limpiando el coche, ya esta fuera limpiando el capo cuando he tenido que quitarle el trapo porque había limpiado hasta los tapacubos. Después de esto hemos ido a lavarlo para rematar la faena y dejarle descansar porque hoy se ha llevado una gran paliza.

Realmente he descubierto una gran aliada para combatir la suciedad y restaurar las cosas pequeñas de mi (nuestro) Peladilla, de hecho creo que he le he contagiado mi afición, no se hasta que punto será esto bueno.